martes, 17 de junio de 2008

*soy injusta y consciente de mi injusticia

Yo aún creo en el tiempo, creo en el sol y en la lluvia, creo en el viento, en las nubes, en la brisa fresca, en el silencio que deja el frío los domingos por la noche... Yo creo que todo eso me guiña un ojo y me cuenta bajito al oído todo menos el parte meteorológico.

Extraño mi dosis de los domingos...
*soy injusta y consciente de mi injusticia


"Cada segundo es único y último en su especie", P.R.A. (vlad)

Suena una canción de country-blues en tu cabeza:
"Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas y entonces se ve estallar una luz azul y todo el mundo suelta un ahhh...", J. Kerouac

viernes, 13 de junio de 2008

Tangos de la sultana

De pequeñita me prometía viajes. Viajes a Zaragoza, viajes a Benidorm, viajes a Asturias y en cierto modo eso ya era para mí el fin del mundo. Me prometía viajes al fin del mundo... Y me hacía soñar. Un día cumplió su palabra y me llevó en su camión por la noche. Recuerdo que me sentía la chica más afortunada del mundo durmiendo en las literas de la parte de atrás de la cabina.

"Ven siéntate aquí conmigo". Me colgaban los pies en el asiento del copiloto y me sobraba más de la mitad, pero un apaño en el cinturón no me faltaba. Yo sé que si esa noche hubiéramos tenido un accidente, no me habría salvado el cinturón, sino el brazo que estiraba cada vez que tenía que frenar para que no me cayera hacia adelante. Su brazo al frenar era para mí la barra protectora de las atracciones de las ferias de Madrid.

Quitó las noticias de Radio Nacional y me puso música. Ninguno de los coches con los que nos cruzamos aquella noche podía imaginar los bailes y las risas que había dentro de aquella cabina.

Hoy, ha llegado a las once de la noche, cansado de una huelga desesperada, incomprensible, desinformada y poco popular. Y a pesar de ello ha estado hablando conmigo una hora y cuarto, dejando esa cena tan merecida para "más tarde".

- Nena, no te he visto con tu cámara de fotos y tu bolígrafo. ¿Dónde estabas? (bromea)
- Estudiando, tío... Pero quiero ver la huelga, quiero estar allí.
- Pasado mañana tenemos Asamblea, ¿te recojo? (no bromea para nada. Me voy)


*respirar de forma voluntaria ^^




Es una de las canciones que me saca las tripas, sobre todo cuando estoy fregando los cacharros y tararearla se me hace mucho más fácil...